Ya sabemos que la meditación viene de antiguas técnicas
orientales que perfeccionadas han llegado a la era moderna para quedarse. Los
avances científicos han incorporado a la medicación en nuevas terapias con gran
eficiencia. Investigadores del globo no
cesan en escudriñar todas sus posibilidades y no dejan a nadie indiferente con
estudios que priman por sobre todas las cosas los beneficios que la meditación
otorga al cerebro.
En diferentes post iremos ampliando la información
1 – La meditación aumenta la materia gris del cerebro:
Ese es el hallazgo de un grupo de investigadores de la UCLA que utilizaron de alta resolución de imagen de resonancia magnética (MRI) para escanear los cerebros de las personas que meditan. En un estudio publicado en la revista NeuroImage y disponible online (por suscripción), los investigadores informan de que algunas regiones de los cerebros de los meditadores a largo plazo son más grandes que en un grupo de control similar.
 |
La corteza órbito-frontal derecha,
se muestra aquí, es una de las áreas del
cerebro que parece estar agrandado
debido a la meditación.
|
Específicamente, los meditadores mostraron volúmenes significativamente más grandes del hipocampo y las áreas dentro de la corteza órbito-frontal, el tálamo y el giro temporal inferior - todas las regiones conocidas para regular las emociones.
"Sabemos que las personas que meditan constantemente tienen una habilidad singular para cultivar las emociones positivas, mantener la estabilidad emocional y tener un comportamiento consciente", dijo Eileen Lüders, autor principal e investigador postdoctoral en el laboratorio de la UCLA de Neuro Imaging. "Las diferencias observadas en la anatomía del cerebro podrían darnos una idea de por qué los meditadores tienen estas habilidades excepcionales".
La investigación ha confirmado los aspectos beneficiosos de la meditación. Además de tener un mejor enfoque y el control de sus emociones, muchas personas que meditan regularmente tienen niveles reducidos de estrés y reforzado el sistema inmunológico. Pero poco se sabe sobre la relación entre la meditación y el cerebro estructura.
En el estudio, Lüders y sus colegas examinaron 44 personas - 22 sujetos control y 22 que habían practicado varias formas de meditación, incluyendo Zazen, Samatha y Vipassana, entre otros. La cantidad de tiempo que habían practicado varió de cinco a 46 años, con una media de 24 años.
Más de la mitad de todos los meditadores dijeron que la concentración profunda era una parte esencial de su práctica, y la mayoría meditaba entre 10 y 90 minutos cada día.
Los investigadores utilizaron una alta resolución, la forma tridimensional de resonancia magnética y dos enfoques diferentes para medir las diferencias en la estructura cerebral. Un enfoque automáticamente divide el cerebro en varias regiones de interés, permitiendo a los investigadores para comparar el tamaño de ciertas estructuras cerebrales. Los otros segmentos del cerebro en diferentes tipos de tejidos, lo que permite a los investigadores comparar la cantidad de materia gris en regiones específicas del cerebro.
Los investigadores encontraron significativamente más grandes mediciones cerebrales en meditadores comparación con los controles, incluidos los mayores volúmenes del hipocampo derecho y el aumento de la materia gris en la corteza órbito-frontal derecha, el tálamo derecho y el lóbulo temporal inferior izquierdo. No hubo regiones donde los controles tenían volúmenes significativamente más grandes o más materia gris que los meditadores.
Debido a que estas áreas del cerebro están estrechamente vinculadas a la emoción, dijo Lüders, "estos podrían ser los apuntalamientos neuronales que dan meditadores la extraordinaria capacidad para regular sus emociones y permitir respuestas bien adaptados a lo que la vida lanza su manera."
Lo que no se conoce, dijo, y se requerirá de más estudios, son lo que los correlatos específicos están en un nivel microscópico - es decir, si se trata de un aumento del número de neuronas, el mayor tamaño de las neuronas o de una determinada meditadores patrón "cableado" puede desarrollan de que otras personas no lo hacen.
Debido a que este no fue un estudio longitudinal - lo que habría seguido meditadores desde el momento en que comenzaron a meditar en adelante - es posible que los meditadores ya tenían la materia gris más regional y el volumen en áreas específicas, para que puedan ellos han atraído a la meditación en el primer lugar, dijo Lüders.
Sin embargo, también señaló que numerosos estudios previos han señalado la notable plasticidad del cerebro y cómo se ha demostrado que el enriquecimiento ambiental de cambiar la estructura del cerebro.
Otros autores del estudio incluyen Arthur Toga, director del Laboratorio de UCLA de Neuro Imaging; Natasha Lepore, de la UCLA, y Christian Gaser de la Universidad de Jena en Alemania.El financiamiento para el estudio fue proporcionado por los Institutos Nacionales de Salud. Los autores informan de ningún conflicto de intereses.
El Laboratorio de UCLA de Neuro Imaging , que busca mejorar la comprensión del cerebro en la salud y la enfermedad, es un líder en el desarrollo de algoritmos computacionales avanzadas y enfoques científicos para la cartografía completa y cuantitativa de la estructura y función del cerebro. El laboratorio es parte del
Departamento de Neurología de la UCLA , que abarca más de una docena de programas de enseñanza de la investigación, la clínica y. El departamento ha puesto N º 1 entre sus pares a nivel nacional en los Institutos Nacionales de Salud de financiación durante los últimos siete años (2002-08).
.jpg)
