Comienzo este post citando a un maestro de la heroicidad, Roberto Shinyashiki en su maravilloso libro “Todo o nada” : […] Avanzar cuando el horizonte es claro es una tarea fácil. Avanzar cuando el horizonte está oscuro es una tarea para quien ha aprendido a vivir. La vida siempre nos coloca delante de situaciones en que saltar hacia lo desconocido es el único camino posible. De lo contrario, no podríamos seguir a delante, no podríamos nacer hacia lo nuevo… […]
En esta etapa tienes que buscar ayuda, la mayoría de las veces es un profesor, un amigo, un jefe, un consejero espiritual o algún familiar como hermano/a, tio/a, padre o madre. Estas personas son otros héroes que nos ayudan a transitar el camino de una forma segura con su experiencia y tranquilidad ante lo ya conocido para ellos y desconocido para nosotros.
Es muy recomendable leer, ver, escuchar constantemente, libros, películas, lo que sea que te lleva adelante. La auto-ayuda es la llave maestra de la paz interior en estos duros momentos. La práctica hace al maestro y los elementos para tomar conciencia son una pieza importante y tus aliados.
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